Me gustaría compartir con todos vosotros el enorme honor que tuvimos hace exactamente una semana de ser recibidos en el Palacio de la Zarzuela por Su Majestad el Rey Felipe VI una representación de la Fundación Irene Villa, que además de transmitir mensajes positivos al mundo de entendimiento, amor, alegría, paz, solidaridad, felicidad… trabaja en proyectos de integración para personas con cualquier tipo de discapacidad o con enfermedades raras, tanto en el ámbito laboral como en el deportivo, ya que la práctica deportiva cambia la vida de las personas, especialmente cuando tenemos alguna dificultad ya sea física, intelectual o sensorial, ya que conlleva una mejora significativa en nuestra calidad de vida. Convertir un reto en una pasión es muy gratificante y consigue que nos comprometamos con nosotros mismos y con la prosperidad de nuestro entorno algo que, a fin de cuentas, revierte en la mejora de la sociedad. SM el rey nos lo dijo muy claramente: “Son muy necesarios esos valores de alegría, compromiso, energía positiva… Y por supuesto el apoyo a la discapacidad que, si bien es un ámbito en el que hay muchas personas trabajando, aún quedan muchos huecos que rellenar, edificios que adaptar y la fuerza que contagiáis -nos dijo- es muy necesaria”. Nos emocionó al ensalzar ese gran espíritu de superación que ha tenido la oportunidad de respirar, por ejemplo, en el Hospital de Parapléjicos de Toledo, a cuyo 40º aniversario acudió con Doña Letizia, y el de la solidaridad que España siempre demuestra. Un gran orgullo contar con personas con tanta sensibilidad y sentido del compromiso.

AUTORA 

rbnNuevaIrene

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Saber que se puede

No hay tiempo para el odio porque no hay paz sin perdón. Perdono para vivir. Espero que este libro, en el que abro mi corazón, anime a la reflexión, la armonía interior y la exaltación de los valores humanos.

Si mi caminar ha servido para que otros valoren sus piernas, sus caminos y sus vidas, el dolor, las caídas y los momentos menos buenos están más que amortizados.

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